Debido a la disconformidad del tamaño de sus senos, muchas
mujeres en el mundo suelen realizarse cirugías para el aumento de su busto casi
sin pensarlo,
ya que su deseo por alcanzar determinados estándares de belleza
muchas veces supera su preocupación por estar saludables.
Pero a pesar de que muchos cirujanos aseguren que este tipo
de operación no supone grandes peligros para la salud ni para mantener un
bienestar físico, hay un riesgo que se corre al someterse a determinado tipo de
implantes que deberías conocer.
No es un riesgo
asegurado
A pesar de que se descubrió que hay una relación directa
entre los implantes de pecho y el desarrollo del cáncer de mama en algunas
mujeres, no significa que un aumento de senos artificial traiga como
consecuencia directa el cáncer de mama.
Así que no debes atemorizarte por estas advertencias,
simplemente debes ser consciente de que sí existen ciertos riesgos cuando tomas
una decisión como esta.
Relación
implantes-cáncer: ¿Qué la provoca?
Debido a que en Francia se detectaron 18 casos de cáncer
directamente relacionados con el aumento de senos, se concluyó que sí existe un
extraño tipo de cáncer provocado por los implantes, denominado linfoma
anaplásico de células grandes.
Este cáncer se produce en el sistema linfático, el cual
forma parte del sistema inmunológico y ocurre cuando los glóbulos blancos en
nuestro organismo comienzan a reproducirse en enormes cantidades.
Si ya tienes un aumento de senos, ¡no debes entrar en
pánico! Los expertos recomiendan no remover los implantes debido a la poca
frecuencia con la que estos casos se presentan en mujeres operadas.
Por lo tanto, intenta seguir los consejos de los
especialistas y no dramatices una situación en la cual no hay necesidad de
hacerlo. Sólo lograrás angustiarte y sufrir mucho estrés, lo que puede traerte
otros problemas de salud.
¿Cómo prevenirlo?
Si igualmente sientes mucha preocupación por esto y quieres
asegurarte de que no corres ningún riesgo, es recomendable que consultes con tu
ginecólogo y realices una mamografía para descartar todas las posibles
amenazas. Esto no sólo ayudará a prevenir todos los peligros sino que también
hará que te
sientas más calmada y libre de preocupaciones.
A pesar de que las probabilidades de que los implantes
puedan provocarte esta enfermedad son muy bajas, te recomendamos que aún así
pienses dos veces antes de exponerte a este tipo de cirugía plástica, ya que
son muy dolorosas y a su vez costosas.
Además, te ves muy bien tal y como eres ahora mismo, lo
único que verdaderamente hará que te veas más linda será tu bienestar físico y
tu felicidad.