Muy lejos de lo que podemos pensar, cuando estamos dormidos
nuestro cuerpo no se para. ¿Sabes qué ocurre en esas horas? Te va a sorprender.
Una de las principales necesidades que tiene nuestro cuerpo
es dormir todos los días, como mínimo 8 horas. Durante las horas de sueño el
organismo se repara y renueva sus energías para asumir una nueva jornada con la
mejor disposición física y mental.
Lo que muy pocos saben es que, justo en este periodo, se
realizan algunas acciones interesantes que influyen en su calidad y también en
la salud en general.
Si eres de los que pensaba que al dormir todas las
actividades del cuerpo se apagan para descansar, estás muy equivocado. Pese a
que en ocasiones no somos conscientes de ello, el organismo sigue sincronizado
con sus funciones y lleva a cabo tareas bastante extrañas.
A continuación te revelamos todas esas cosas que te ocurren
cuando logras conciliar un sueño profundo. ¡Te sorprenderás!
1. Incrementa el
movimiento de los ojos
Se estima que durante el ciclo de sueño atravesamos por
cinco etapas, siendo la última la más profunda de todas. Esta se conoce como la
fase de REM (Rapid Eye Movement, o Movimiento Rápido de los Ojos) y se
caracteriza por un movimiento continuo de los ojos, de adelante hacia atrás,
que no queda en la memoria al despertar.
Se logra alcanzar más o menos unos 90 minutos después de
dormir y supone un gasto del 20% total del sueño. Por ahora no hay un motivo
exacto que lo explique, pero se cree que podría deberse a la excitación
neuronal.
2. Se produce la
hormona de crecimiento
Una de las razones por las que tener una buena calidad de
sueño es tan importante es porque, justo en este momento, el organismo segrega
hormonas como la HGH o de crecimiento, necesaria para regenerar los tejidos,
huesos y músculos, y esencial para un adecuado desarrollo de los niños.
Esta sustancia también es requerida para combatir los bajos
niveles de azúcar en la sangre y regular el metabolismo.
3. Hay retraso en los
riñones
Durante la jornada activa los riñones trabajan para filtrar
las toxinas presentes en la sangre y producir orina.
En el periodo de sueño ese trabajo se hace más lento y hay
una menor producción de orina en comparación con el día. Esto explica por qué
casi nunca es necesario levantarse a orinar durante la noche y al día siguiente
esta tiende a ser más oscura.
4. Rechinar los
dientes
Este raro síntoma puede ser producto del estrés o porque los
dientes no están alineados de la forma adecuada.
En términos profesionales se conoce con el nombre de
bruxismo y, en ocasiones, hace que la persona sienta dolor en la mandíbula y
complicaciones dentales.
Es importante consultar a un dentista porque es un factor
que, a largo plazo, influye en el deterioro dental.
5. Movimientos
bruscos
Esto nos ha pasado a la mayoría: nada más conciliar el
sueño, de repente, damos un salto o sentimos una fuerte sacudida.
Es algo que ocurre de forma habitual y no debe ser motivo de
preocupación. Lo que ocurre es que el cerebro se está organizando para los
cambios que ha de hacer en este ciclo y, en ocasiones, lo interpreta como una
caída.
El fenómeno se conoce como
impulso hipnótico y solo sucede durante el periodo de descanso.
6. El cerebro desecha
lo que no necesita
Gracias al sistema glinfático, el cerebro acumula durante al
día una serie de información que en la noche analiza para desechar aquello que
no necesita.
Este sistema es la vía de limpieza del sistema nervioso
central y también cumple la función de deshacerse de proteínas extracelulares,
exceso de fluido y productos inservibles del metabolismo del tejido periférico.
7. Parálisis del
sueño
Casi todos lo experimentan en algún momento de su vida,
algunos con más frecuencia que otros. Se produce en la fase más profunda del
sueño y se caracteriza por una molesta sensación de inmovilidad corporal en un
ciclo en el que tenemos consciencia que estamos soñando.
Es un fenómeno que resulta aterrador porque a menudo viene
acompañado de horribles pesadillas en las que se es incapaz de tener algún tipo
de reacción para escapar.
Para terminar…
¿sabías que durante el sueño también se consume energía?
Todas las acciones que desempeña el organismo en este
periodo suponen un gasto energético significativo que influye para bien en el
control del peso. Esta es la razón por la que las personas que no tienen una
buena calidad de sueño tienden a tener más sobrepeso y obesidad.
